Crónica a cargo de Borja Díez «Kuduk»

La última actividad del Smial de Númenor antes del parón veraniego ocurrió la tarde del pasado sábado 13 de julio en el mercado de Chamberí, en Madrid, asegurando que la comida y la bebida no faltaran con la libertad de cada uno para elegir su preferencia, el momento y la cantidad. Además, es un lugar más que adecuado para reunir a más de 40 personas entre miembros de Númenor y amigos del Smial de Hammo y del Smial Montaraz.

A diferencia de otras reuniones con un tema central, yo creo que estos eventos informales también son parte del alma del Smial y os contaré por qué personalmente lo creo así: me permite reencontrarme con gente que hacía tiempo que no veía y así ponernos al día, conocer un poco más a otros miembros con los que por falta de tiempo o por no coincidir en otras actividades no había tenido la oportunidad de hablar un buen rato, y también son las ocasiones perfectas en las que poner cara a personas de las que solo había leído mensajes en el grupo de Whatsapp.

Es increíble que siempre está garantizado un maravilloso resultado, no solo te sentirás cómodo y arropado, sino que seguro aprenderás algo o te sorprenderás con alguien. También te enterarás de algún chismorreo tolkiendili (o no) y te echarás unas buenas risas. ¡Planazo!

Casi al final de la velada se realizó el tradicional brindis mirando hacia el oeste, la excusa para reunirnos y compartir unos buenos momentos, en los que siempre nos acordamos de todos los amigos que no pudieron venir y echamos de menos: «Por Númenor y por los amigos ausentes».

Otra cosa tradicional en nuestras reuniones es realizar un sorteo, en este caso se regaló una épica jarra llegada desde la posada de El Póney Pisador, envidia de muchos, y que recibió el afortunado Diego «Tornasauce». ¡Enhorabuena!

Es un buen indicador que cuando la gente se despide para irse, al final se demore otro buen rato hablando. Tanto… que como es otra costumbre, cerraron el garito y nos invitaron a irnos.

A pesar de no poder haber hablado con toda la gente que me hubiera gustado por falta de tiempo, con una pila de cosas que leer, ver e investigar me despido de todos los asistentes con mis mejores deseos para este verano, a quienes les agradezco el buen rato y espero nuestro encuentro en unos meses. ¿La próxima vez te unirás a nosotros?