Crónica a cargo de Jesús Sahuquillo «Carcharoth»

El 22 de septiembre es una fecha muy especial en el corazón de cualquier fan de Tolkien: marca la celebración del cumpleaños de dos valerosos y aventureros hobbits, Bilbo y Frodo Bolsón. En este día, todos los smiales de la Sociedad Tolkien Española nos reunimos para brindar a la salud de estos personajes. En el smial de Númenor también nos sumamos a las celebraciones, y para ello nos reuinomos el pasado sábado 21 de septiembre en el mercado de Chamberí en Madrid, uno de nuestros lugares de reunión habituales, para compartir conversaciones, anécdotas, bromas y muy buen ambiente. La asistencia fue muy buena, con más de 30 asistentes, socios habituales y nuevos, y también personas interesadas que nos conocieron por redes.

Esta celebración, no obstante, no estuvo exenta de lágrimas. Igual que Frodo tuvo que decir adiós a su querido tío Bilbo, así también nosotros tuvimos que decir adiós (aunque queremos pensar que es más bien un hasta pronto), a dos de nuestros miembros más activos y participativos: Vardamir y Brea Kaladriel tomarán un barco en los puertos de Númenor para partir rumbo al sur. Hubo una emotiva despedida con unas palabras que nos prepararon con motivo de su partida, donde las lágrimas corrieron a raudales. Mas nadie dijo «no lloréis», pues no todas las lágrimas son amargas.

También a nuestra compañera Linteril tuvimos que dedicar unas palabras, ya que abandona temporalmente la isla Estrellada para aventurarse a la isla de Albión al norte. Al igual que a los anteriores compañeros, le deseamos lo mejor en su nuevo periplo, y que vuelva cargada de experiencias y relatos por contar.

Y como les deseamos un feliz viaje y un próspero regreso, los tres fueron obsequiados con una de las tradiciones más bonitas del smial: la entrega de una rama de Oiolairë, como se daba a los marineros númenoreanos, en una placa de madera con el emblema del smial de Númenor.

Una vez repartidos los abrazos y secadas las lágrimas, se procedió al sorteo de una lámina de la artista Patcas entre todos los asistentes, donde el afortunado ganador fue Lasbelin. Después la fiesta siguió hasta el cierre del mercado, y unos pocos valientes siguieron festejando incluso más allá.

Nos sentimos muy afortunados de haber podido celebrar este cumpleaños, aún más emotivo de lo habitual, rodeados de tan buena compañía, y donde queda demostrado que más que una asociación, somos una gran familia.

Por muchos más años celebrando el cumpleaños de Bilbo y Frodo con tanta alegría. ¡Nos vemos el año que viene!